El 26 de marzo, en el imponente estadio Arena de Londres sonaron por ultima vez los acordes de las tan conocidas, tarareadas, bailadas, y cantadas canciones de Genesis, esas que nos acompañaron tantos años, que nos enamoraron y que marcan una época inolvidable de la música pop y del soft rock.

Fue el mismo Phill quien anuncio que esa sería la última presentación de la banda la cual se completa con Tony Banks y Mike Rutherford: “Es una noche verdaderamente muy especial”, dijo Phil Collins al público del O2 Arena de Londres. “Es la última parada de nuestra gira, y es el último show de Genesis. Es difícil para nosotros creerlo.”
Phill Collins está atravesando un delicado y frágil estado de salud, motivo que llevo a verlo sentado y retirarse del escenario ayudado por un bastón que ha estado usando desde que se sometió a una cirugía en la espalda en octubre de 2015.
Pese a todo esto, la salud tan preocupante de Phill y verlo alejado de la batería desde hace tanto tiempo debido a sus problemas de vertebras que lo aquejan desde 2009, una multitud de más de 20.000 espectadores disfruto de 20 temas perfectamente seleccionados para sintetizar la larga carrera de la banda londinense. El show duro mas de dos horas y conto con una puesta en escena formidable.

