Los incendios eléctricos son un riesgo potencial en cualquier entorno donde se utilice electricidad. Por eso, desde la Secretaría de Emergencias y Gestión de Riesgos compartimos consejos claves para la prevención.

En general, las causas obedecen a sobrecalentamiento, cables dañados o conexiones defectuosas sin el aislamiento adecuado.

Además del riesgo del fuego, los incendios eléctricos pueden generar humo tóxico y gases nocivos que aumentan aún más el peligro para la salud y la seguridad de tu domicilio.

Revisa regularmente las instalaciones eléctricas de tu hogar y reemplaza cables dañados.

Evita sobrecargar enchufes y tomas múltiples.

Mantén los aparatos eléctricos a una distancia segura de materiales inflamables.

Desconecta los electrodomésticos que no estés utilizando para evitar sobrecalentamientos.

No manipules instalaciones eléctricas sin la debida capacitación. Siempre consulta a un electricista profesional

Instala detectores de humo y verifica su funcionamiento periódicamente.

Recuerda: la prevención es clave para mantener tu hogar seguro y libre de incendios eléctricos.