Comunicación Política: Estrategias y Efectos, Nueva Columna de Opinión de Hipatia Vla.

DISCURSO POLITICO. PARA QUIÉN, PARA QUIENES Y PARA QUÉ

Basado en la obra «Análisis lingüístico y discurso político» M.M. García Negroni y M.G. Zoppi Fontana

Contrariamente a lo que comúnmente se cree, todo discurso político tiene más de un destinatario, lo que no se refiere a la cantidad de público que lo recibe, sino a qué conjunto de ciudadanos es dirigido.

Encontramos entre los receptores de un discurso político a tres tipos de destinatarios. 

Primero, a los seguidores o simpatizantes del emisor, en el que la estructura del discurso contiene las propuestas electorales y las ideas compartidas.

Segundo, a aquellos electores indecisos o independientes, hacia los que se aplicarán todos los recursos comunicacionales (gestos, miradas, tonalidades de voz, énfasis, etc.) para tratar de persuadirlos o disuadirlos de determinadas propuestas o creencias.

Un tercer destinatario es el adversario, al que se lo irá construyendo discursivamente, para, sin nombrarlo, llegar al objetivo de debatir y confrontar con sus propias propuestas. Conformándolo como contracara del proyecto que el orador ofrece al electorado.

En el para qué del discurso político, encontramos la intención también de conformar un tipo específico de ciudadano. Como consecuencia de una determinada manera de dirigir la comunicación de un enunciado, puede buscar convertir al destinatario o ciudadano en un receptor pasivo o autónomo.

Cuando el enunciado se manifiesta como certeza o verdad incuestionable, convierte al destinatario como simple receptor de una postura hegemónica, quien se verá obligado a compartirla para no correr el riesgo de quedar fuera de la opinión generalizada.

Por el contrario, cuando quien pronuncia el discurso lo relativiza de manera explícita, manifestándolo como creencia u opinión, deja al destinatario en libertad para tomar su propia posición ante lo dicho.

En definitiva, son objetivos que, con sutiles mecanismos de comunicación, traen como consecuencia la conformación de ciudadanos democratizados o tiranizados.

HIPATÍA VLA