Finalmente paso lo que se veía venir. Las aplicaciones de transporte del tipo UBER llegaron a Villa la Angostura. Hace un tiempo que viene funcionando en Angostura con un éxito relativo por la escala de la localidad y la cantidad de habitantes, pero la diferencia de precios para trasladarse, es muy significativa con respecto a los autos tradicionales u Oficiales del Tipo Taxi o Remis y eso hace que muchos usuarios prefieran usar estas aplicaciones.

Obviamente los primeros afectados son los propietarios de los autos autorizados por el municipio para brindar los servicios de transporte de pasajeros y la primera reacción es la «presión» sobre el ejecutivo para que aumente los controles en la calle.

La primera respuesta de los ejecutivos municipales es casi calcada en cada una de las localidades en las que estas aplicaciones desembarcan. Salen a la calle, multas, amenazas de quitar el registro, advertencias de la falta de habilitación y de seguridad etc. etc.

Y el resultado de estas acciones es el mismo en cada una de las localidades en las que desembarcaron estos nuevos métodos de transporte.

La Tecnología, la posibilidad de saber con anticipación el precio del viaje, las formas de pago y la facilidad de usar el teléfono que pasa mas tiempo en nuestras manos que en bolsillo para pedir un auto, el bajo costo y rapidez de respuesta del servicio además de ofrecer una opción laboral para muchas personas que están buscando mas ingresos, hacen que sea una tarea casi imposible de lograr. La erradicación de este servicio, mientras usemos aplicaciones y el teléfono para casi todo, es una tarea casi imposible.

Por eso es que en la mayoría de las ciudades, luego de meses o años de pelear, los Autos Oficiales, suelen armar aplicaciones similares para competir y se adaptan a las nuevas tendencias de consumo en el servicio que ofrecen para poder sobrevivir.