Estrenada el 11 de junio de 1982, “ET”, sigue emocionando a grandes y chicos a lo largo de estos 40 años, quienes la vimos en el cine cuando se estrenó en Argentina, quienes la vieron en VHS, o si la engancharon haciendo zapping en algún canal de la tele. Nosotros, nuestros hijos, nuestros nietos, quien deja de derramar alguna lágrima cuando ET se despide de  Elliott.

Considerada una de las mejores películas de Steven Spielberg, deslumbra con su magia y encanto infantil que la convirtió en una película de culto para los amantes de la ciencia ficción. De una trama muy simple, un niño de la tierra entabla una relación de amistad con un ser de otro planeta que queda varado accidentalmente. 

Spielberg basó su idea de E.T. en un amigo imaginario que había creado para sí mismo tras el divorcio de sus padres. La película está filmada desde el punto de vista de los niños. Además de ser una gran aventura de ciencia ficción, E.T. es considerada una de las mejores películas infantiles de la historia. Y no solo por el hecho de que los protagonistas sean niños, sino porque los conceptos y las situaciones que se desarrollan son mayormente concebidas desde la mente de un niño.

La creación de E.T., tanto su concepto visual como su funcionamiento, era vital para la película. Sin él no había film. En su creación se invirtió un millón y medio de dólares, el 15% del presupuesto total. La película fue nominada a nueve premios Oscar; sin embargo, solo se llevó cuatro, el de Mejor Banda Sonora y tres en las prosaicas categorías técnicas.

E.T. se transformó en un fenómeno. Hubo libros, posters, remeras, toallas, lapiceras y muñecos. Y tuvo su frase célebre, que se instaló en la cultura popular: E.T. phone home.

Sin dudas una pelicula que nos llena de nostalgia, nos lleva a la infancia y a lo simple de esa época, la amistad por sobre todas las cosas y la lucha por lograr lo justo.