El hecho de una gravedad extrema ocurrió bajo la presidencia de David Tressens, quien esta de licencia por la investigación de la justicia penal por los delitos de desobediencia a un funcionario público en el ejercicio legítimo de sus funciones (artículos 239 y 45 del Código Penal); y por incumplimiento de los deberes de funcionario público, en calidad de autor (artículos 249 y 55 del Código Penal).

La mayoría de los que se enteran o van enterándose de esta situación, están asombrados que esta situación, que representa un error administrativo grave, haya sucedido y descubierto casi un año después, además de pasar por dos periodos administrativos, el de 2021 que no lo descubrieron y el de 2022 que solo en Septiembre de este año fue descubierto por las nuevas autoridades del deliberante, que asumieron cuando Tressens Ripoll pido licencia para enfrentar la acusación penal en su contra.

En la sesión del 25 de Octubre de 2021 el Frente de Todos informa en tiempo y forma de la baja de una de sus asesoras a partir del día 20 de Diciembre del mismo año, y es elevada a la secretaria parlamentaria para su procesamiento administrativo.

En la Sesión del día 27 de Octubre de 2021 la nota es informada al resto de los bloques y al publico en general.

A partir de ahí el bloque de concejales de Frente había cumplimentado con todos los procedimientos que marca el reglamento, los usos y costumbre y los procesos administrativos vigentes, por lo que a nuestro entender no le cabe ninguna responsabilidad administrativa en el tema.

Casi un año después desde la presidencia a cargo por Walter Espindola, se eleva una resolución de presidencia con fecha del día 16 de SEPTIEMBRE de 2022 donde se informa del «error administrativo» de la presidencia en su momento a cargo de David Tressens Ripoll.

La resolución que por forma suele ser enviada con copia a TODOS los bloques del deliberante, esta vez solo fue remitida a Recursos Humanos del municipio que según fuentes allegadas a esa oficina, no salían de su asombro ante la situación y la liviandad con la que las autoridades del deliberante estaban tratando este tema.

Habrá que seguir de cerca la postura del Auditor municipal, y en principio el «error» administrativo tienen responsables con nombre y apellido, Por un lado el presidente del deliberante en ese momento, por el otro la secretaria parlamentaria de ese momento también que continua trabajando en el concejo con otro cargo, pero de muy similar responsabilidad.