La renuncia de David Tressens a su cargo de concejal, deja al concejo en una situación complicada desde el punto de vista institucional, donde además de obligar a todo un movimiento de lugares en las listas, se suma la inesperada situación de acefalia del cuerpo colegiado. dejando la posibilidad abierta y muy real de que el MPN pierda la conducción del legislativo.

Que diferencia hay en este caso comparado con la licencia del juicio penal.

La principal diferencia es la de la renuncia justamente de David Tressens a su banca, no es una licencia es una renuncia, lo que provoca automáticamente una acefalia en la presidencia del concejo deliberante. O sea, no es algo temporal, es algo permanente y la Carta Orgánica es clara en cuanto a como hay que proceder en estos casos.

El articulo 13 enuncia los paso a seguir y el procedimiento para el nombramiento de una nueva autoridad, que debe ser elegida por 2/3 de los concejales.

Además el mismo articulo habla de la obligación de aceptar o no esa renuncia, en este caso por mayoría simple, acá no se vislumbra un problema si es que es intención de Tressens no participar mas en el deliberante en lo que resta de su gestión.

Quien asume la presidencia.

En la carta orgánica esta escrito claramente que las nuevas autoridades deben ser aprobadas en la misma sesión donde se trate la renuncia del presidente saliente, y ahí deberán decidir si sigue María Eugenia Mesa, actual Vice Presidenta del Concejo que pertenece al FDT o nombran un nuevo o nueva presidente del cuerpo colegiado.